Costa Rica es un país que posee una alta diversidad de aves. Hasta el día de hoy se han descrito un total de 857 especies, distribuidas a todo lo largo y ancho del país, incluyendo especies que habitan desde las zonas costeras (aves marinas) hasta las partes más altas de nuestro país, como por ejemplo el Cerro de la Muerte y en el Chirripó.
Debido a la amplitud de este grupo, existen distintas formas de clasificación. Por ejemplo, de acuerdo al tiempo de permanencia en nuestro país las podemos clasificar en residentes (permanecen todo el año) y migratorias (permanecen solo en una época del año), mientras que de acuerdo al tipo de hábitat en donde viven se pueden clasificar en aves terrestres (habitan en hábitats terrestres) o acuáticas (requieren de un medio acuático para vivir).
En el caso de las aves acuáticas en Costa Rica pueden ser clasificadas como aves marinas, costeras y especies de agua dulce. La mayoría de las aves marinas son migratorias y se reproducen muy lejos de Costa Rica, en sitios tan lejanos como Australia, Nueva Zelanda, la Antártica y la Siberia, mientras que muchas de las especies de agua dulce como los patos y algunas especies de garzas se reproducen en Norte América. Todas ellas luego viajan a los humedales de nuestro país para invernar. Así mismo encontramos muchas otras especies residentes las cuales permanecen toda su vida en nuestro país por lo que se alimentan y se reproducen en estos ecosistemas de humedal.
En general, considerando los tres grupos antes mencionados, en Costa Rica existe un total de 168 especies de aves acuáticas, lo cual corresponde a cerca de 20 % de la avifauna total del país. Dichas especies se distribuyen en más de 350 humedales o ecosistemas acuáticos, ubicados desde las tierras bajas hasta las tierras altas, once de ellos de importancia internacional o sitios Ramsar. Algunos de los más importantes para aves acuáticas el Parque Nacional de Palo Verde, el Golfo de Nicoya y sus manglares, Caño Negro, Tortuguero y la Isla del Cocoen los cuales cientos de garzas, cigüeñas, patos, chorlitos, cormoranes, piqueros, gaviotas y charranes los utilizan como sitios para invernar o para la reproducción.
Sin embargo, recientemente debido a la contaminación, destrucción y drenaje de muchos de los humedales, muchas de las poblaciones de aves acuáticas han disminuido enormemente lo que ha generado que se encuentren amenazadas y en peligro de exticnión.
Dentro de las especies en peligro de extinción podemos mencionar las siguientes: el galán sin ventura Jabiru mycteria, la espátula rosada Platalea ajaja, el pijije Dendrocygna bicolor; la garza del sol Eurypyga helias y el pato candil Heliornis fulica.
A continuación se describe cada una de las especies antes mencionadas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario